Los espacios comunes eran muy acogedores y elegantes, con muebles clásicos y cuadros bonitos en las paredes. Además, el hotel era muy accesible para personas mayores como yo, con ascensores amplios y pasillos bien iluminados.

Me gustaría que hubiera actividades específicas para personas mayores durante la estancia. Los niños que trabajaban allí eran muy amables, pero sería bueno tener opciones pensadas especialmente para nosotros, como excursiones o clases de ejercicio suave.

Excelente ubicación y precio.

Nada

La ubicación es maravillosa, está a poca distancia de la Plaza de los Vosgos. En la calle de enfrente había una panadería y una boutique.- Las comodidades de la habitación eran limpias.Reescritura: El Hotel Du Vieux Saule en París tiene una ubicación maravillosa, a solo un paso de la Plaza de los Vosgos. Además, en la calle cercana encontrarás una panadería y una boutique. Las habitaciones cuentan con 2 camas individuales y las comodidades están impecablemente limpias.

Nos ha gustado mucho nuestra estancia en este lugar. Hemos pasado unos días geniales en este hotel, que nos ha parecido magnífico y maravilloso.- Un personal muy bueno y muy amable con una buena dosis de buen humor.- Todo fabuloso y acogedor, teníamos un baño abierto.- Disponía de instalaciones como un minibar, una caja fuerte personal, una plancha y tabla de planchar.- Comida fresca, vistas fabulosas, servicios estupendos.- La ubicación era excepcional, relativamente cerca de Le République.- Además, restaurantes y cafeterías estaban muy cerca de la propiedad.- Había una estación de metro muy cerca del hotel.

Cortesía y ayuda del personal, en particular la excelente M.me Juliette de la recepción, excelente ubicación.

La ubicación.

La habitación pequeña. pero en París es normal!

Hotel con fachada floreada e iluminación bicolore encantadoras. Desayuno buffet en bodega de piedra arqueada. Ubicación en el corazón del Marais, cerca de tiendas y restaurantes.

Qué divertido! El ascensor y las escaleras son ideales para una clase de claustrofobia.

El servicio al cliente también era excelente. Ubicación lo suficientemente cerca de subterraneo, de un supermercado y también de la capital.

Mi estancia en el hotel Du Vieux Saule fue maravillosa. La ubicación central en el animado barrio de Le Marais me permitió disfrutar de la tranquilidad y comodidad de la cama. Dormí muy bien, lo cual es lo más importante. Además, el personal fue amable y tuve un detalle agradable en la habitación con un hervidor de agua, infusiones y café. cabe destacar que el agua del grifo era de muy buena calidad.

No tengo nada negativo que decir 😊

Ubicación perfecta; habitación muy limpia

La ubicación del hotel es excelente, en pleno corazón de Le Marais, a pocos minutos a pie del centro. A pesar de ser un hotel de tres estrellas, la decoración es moderna y con buen gusto. La cama era muy cómoda y grande, lo cual permitió un descanso reparador. Además, el personal del desayuno fue muy atento.

Aunque hubo algunos aspectos negativos, como el tamaño reducido de la habitación y el baño, considero que estos inconvenientes se pueden adaptar. Por lo tanto, en general, recomendaría este hotel para una estancia en París.

Una experiencia genial. Es un hotel en una zona preciosa, justo delante de la estación de metro. Con habitaciones acogedoras. Dormitorio muy cómodo, cama suave y baño grande. Tenía vistas al jardín y un personal muy amable. Una atención al cliente estupenda. El WiFi gratis disponible en el hotel. Una ubicación brillante y excepcional, a 15 minutos a pie de la Plaza de los Vosgos...

Me alojé aquí durante un viaje de negocios, ya que fue elegido por nuestro director. Los accesos al jacuzzi, la sauna y el jardín del hotel realzaron aún más mi satisfactoria estancia. No hay nada mejor que relajarse en el jacuzzi después de un largo día de reuniones. Además, el jardín era un oasis de tranquilidad en medio de la bulliciosa ciudad.

En cuanto a los aspectos negativos, tengo que mencionar que la habitación era bastante pequeña.

Una ubicación perfecta en el corazón del animado barrio del Marais, rodeado de cafés de moda y tiendas encantadoras. Es como estar en el centro de todo el bullicio y la emoción de París. La habitación con cama tamaño queen es como un pequeño oasis. Me sentí como una celebridad en una suite exclusiva, con todas las comodidades y lujos a mi alcance. El desayuno buffet en la bodega de piedra arqueada es una experiencia encantadora. Me sentí como en una película francesa, disfrutando de croissants recién horneados y café delicioso mientras planificaba mi día en la ciudad. El personal del hotel hizo todo lo posible por asegurarse de que mi estancia fuera perfecta. Siempre amables y dispuestos a ayudar, fueron como mis guías personales en París.

El baño en la habitación era un poco pequeño. No hay mucho espacio para moverse, especialmente si viajas en pareja.

Hotel céntrico, a 5 minutos a pie del centro de Le Marais, cerca de varias estaciones de metro, un 3 estrellas muy correcto, limpio, con cierto gusto, habitación y baño un poco pequeños pero renovadas y bien cuidadas. Habitaciones sonoramente aisladas unas de otras. Precio asequible en el mes de enero. Personal atento y educado.Todo estuvo muy bien.

Nada en especial, tendrán que mejorar el aislamiento de las ventanas a la calle, pero a la hora de dormir, que es cuando estás en el hotel, no hay ruido, y se descansa perfectamente.